QUE TREINTA AÑOS NO ES NADA
José Luis Melero
29 de junio de 2016. Treinta aniversario de CHA
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Hace treinta años yo no había cumplido treinta años. Ni yo ni prácticamente ninguno de aquellos jóvenes aragonesistas que fundamos CHA. Sólo nos movía la pasión por Aragón. Ningún otro interés. Allí ni los más optimistas pensaban que un día llegaríamos a ser el tercer partido político del país. Todos ponían (esfuerzo, trabajo, un poco de dinero…) y nadie se llevaba nada. Así ha sido siempre. Gente ejemplar, que no se volvió loca cuando el partido obtuvo casi cien mil votos, ni culpó a su pueblo cuando las cosas fueron mal. Gente honesta, gente muy preparada que nunca ha sido soberbia, ni engreída, ni altanera. Gente que sabía que en política se está de paso y que luego supo volver a sus anteriores trabajos. Aragoneses que nunca se avergonzaron de serlo. Y que lo eran por encima de todo. CHA no habría podido sobrevivir si en Aragón no hubiera existido un sentimiento identitario que sólo esperaba ser conducido y canalizado. Y los aragoneses creyeron que las gentes de CHA eran distintas al resto de la clase política, porque nadie que pretendiera trepar o colocarse iba a arrimarse a un partido como aquel que tan pocas prebendas presagiaba. Los arribistas, por tanto, nunca se acercarían. Hoy CHA cumple treinta años y me invade una gran melancolía. Pienso en mi querido Labordeta y en los que se volvieron a casa después de dejarse la piel por Aragón: en Chesús Bernal y en Nieves Ibeas, en Azucena Lozano, en Salvador Ariste y en Chesús Yuste, en Toño Gaspar y en José Antonio Acero, en Lorenzo Lascorz y en Miguel Gargallo, en Antonio Pérez y en Francho Nagore, en Gonzalo Orna y en Carmen Gallego…, y en tantos y tantos que en estos años supieron conciliar la pasión por su país con la pasión por la justicia social y la igualdad, el aragonesismo con la libertad, el orgullo de ser y sentirse aragoneses con la necesidad de ser fraternos y solidarios. Este partido, nacido aquí, para gentes de aquí y dirigido por gentes de aquí, cumple treinta años. Y yo, que nunca he hecho vida de partido, ni he tenido jamás cargo orgánico o institucional alguno, que tengo tantos o más amigos en otros partidos que en el propio, que odio el sectarismo y que sé reconocer que muchas veces nos equivocamos y que los demás aciertan, creo que estoy legitimado para decir sin empacho que una de las mejores cosas que le han pasado a Aragón en estos últimos años ha sido tener un partido como CHA, nacido sólo para quererlo, para servirlo, para defenderlo. Sin pedirle nada a cambio. |
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